CUAUTITLAN
IZCALLI (MÉXICO)
DÍA 2 DE JUNIO
CRÓNICA DEL DIA
Este día estuvo marcado por las dos
intervenciones del Ministro General que querían iluminarnos nuestro camino de
adaptación y enriquecimiento de nuestras Constituciones. En esta segunda etapa
del encuentro después de exponer las realidades de los distintos países donde hay Hnas.
Capuchinas, nos toca discernir y para ello, las palabras del P. Mauro nos
ayudaron mucho.
Antes de iniciar, se presentaron las
dos hermanas Clarisas de la Adoración Perpetua que llegaron la noche anterior, pertenecientes a
una Federación compuesta de 14 monasterios.
Nos habló de Identidad y pertenencia
en referencia a la carta que envió a toda la Orden en octubre de 2014. Aunque
se refería más directamente a los Hnos. Capuchinos también nos toca a nosotras. Después de
explicarnos el porqué de esta carta tras
la renovación de las Constituciones de los Capuchinos, nos comentó lo que él
entiende por IDENTIDAD, que es el modo de vivir una orden, su carisma, su
espiritualidad, que normalmente encontramos en el texto escrito. Y PERTENECER. Cuando la identidad no es sólo
proclamada sino vivida. Nos dijo: “Por
tanto, sí existe una identidad capuchina pero no es una cosa estática. Es algo
vivo. Se encuentra en la persona que lo vive en el tiempo. Los
capuchinos surgen porque un grupo de
hermanos quería vivir más espiritualmente la Regla y el Testamento de San
Francisco, de una forma nueva, sin privilegios, de manera integral. Esto no lo
podemos olvidar, nacimos de una
exigencia…. Deciden vivir en austeridad y coherencia de vida, en lugares
apartados, de manera sencilla. No se hablaba entonces nada de vida fraterna.
Ahora es una exigencia vivir la vida fraterna en disponibilidad…. Hoy día la
vida fraterna es más exigente que la
pobreza….La vida de oración es impensable sin una vida fraterna. El Papa
Francisco me dijo en una ocasión que vida de oración y vida fraterna es vida de
conflictos y si estos no existen, no hay vida fraterna…”. También nos dijo: “Hermanas y hermanos estamos llamados a ser testimonio de una búsqueda constante de Dios”.
Aprovechamos para un turno de
preguntas y ahí también el P. Mauro nos decía que la vida contemplativa en
Europa es un desafío grande porque también la ausencia de Dios hace no valorar
la vida de las personas mayores. Y: “hoy el gran desafío en la iglesia y en el
mundo es la comunión. Somos enviados para vivir en comunión y enseñar la
comunión. Eso nos diferencia de los benedictinos u otras órdenes religiosas. La simplicidad es importante pero QUE TOMEMOS
DECISIONES JUNTOS”. Y en relación al discernimiento vocacional nos dio una
consigna: “Cuando alguien llama a nuestra
puerta y se descubre que rígido y se
esconde en las leyes y en el Código de derecho canónico, se puede ver que no
están hechos para la vida fraterna, porque vivir juntos exige mucha
flexibilidad”.
Como es normal nos hicimos la foto de
familia como es de rigor en estos encuentros. Espero que la fotógrafa nos haya sacado bien a
todos.
Y continuó la intervención del
Ministro General, en esta ocasión contándonos el proceso de renovación de las
Constituciones de los Hermanos Capuchinos con sus luces y sus sombras. Y que nosotras para la revisión de las nuestras aprendiéramos de sus errores y que tomemos
en cuenta tres conceptos: RESPETAR, ENRIQUECER E INCORPORAR.
En la comida ya lo despedimos pues
debía marchar para Italia y posteriormente para presidir el capítulo de la
provincia de Suiza. Le cantamos las
canciones oportunas de despedida y le
agradecimos su presencia y su palabra que nos ilumina en este camino de
renovación de nuestras Constituciones.
A la tarde volvimos a reunirnos en
grupos para recoger las resonancias y reflexiones personales a partir de estas
dos conferencias y también estuvimos dialogando sobre los ejes de identidad que
deberían clarificarse mejor, los elementos de desarrollo de pertenencia en los
distintos niveles (comunitario, federal, general) y qué iluminación podemos
tomar de la experiencia de los Capuchinos para la renovación de las
constituciones de las Clarisas capuchinas.
La
Eucaristía presidida por el P. Guillermo
Kraus nos comentó algunos detalles de la vida de San Félix de Nicosia, hermano limosnero que siempre mantuvo un gran
equilibrio en sus convicciones y que
sufrió mucho con el guardián que tuvo por 33 años y que nunca le llamó por su
nombre, sino que siempre utilizaba palabras de desprecio cuando se dirigía a
él, excepto una vez que lo llamó por su nombre antes de morir. Y el P.
Guillermo también nos indicó 3
indicaciones para dar a los novicios/as cuando entren en nuestros noviciados:
2. Esto no es el cielo.
3. No seas un asno.
Creo que no es necesario hacer la
exégesis de estos principios. Que cada una los reflexione y se los aplique.
Seguimos
contando con vuestras oraciones para que
sigamos participando en este encuentro con espíritu de comunión.
En
Alabanza de Cristo. Amén.
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