lunes, 23 de mayo de 2022

Santas Fundadoras: Carta por la canonización de la madre Rubatto y la madre Santocanale

 


Es con gran alegría y gratitud al Señor que el 15 de mayo de 2022 festejamos la celebración de la Canonización de María Francisca de Jesús (llamada Ana María Rubatto), fundadora de las Hermanas Capuchinas de Madre Rubatto, y de María de Jesús (llamada Carolina Santocanale) fundadora de las Hermanas Capuchinas de la Inmaculada Concepción de Lourdes; dos mujeres que supieron responder a las penurias y necesidades de los pobres. Este acontecimiento es además un signo vivo y brillante de la profunda comunión entre la Orden de los Frailes Menores Capuchinos y la gran Familia que ha ido creciendo a lo largo del tiempo, agregando a muchos Institutos femeninos y masculinos.
Los dos Institutos entran a formar parte de la gran Familia Capuchina con el decreto de agregación del entonces Ministro General, fr. Pacífico de Seggiano: el 10 de junio de 1909 para las Hermanas Capuchinas de Madre Rubatto y 8 de diciembre de 1909 para las Capuchinas de la Inmaculada de Lourdes. Desde entonces han compartido con nosotros el don que San Francisco de Asís recibió del Señor: vivir juntos en pobreza y minoridad.

CARTA COMPLETA EN ESPAÑOL













CURSO DE FORMACIÓN PERMANENTE 2022

Del 1 al 21 de mayo de 2022 se desarrolló el curso de formación permanente en español y portugués con 27 hermanos y hermanas. “Vivir según la forma del Evangelio al estilo de Francisco y Clara” es el título de esta propuesta formativa donde juntos recorremos los pasos de nuestros fundadores en los lugares que habitaron en Asís, Roma y otros sitios significativos.

Participaron 10 hermanas Clarisas Capuchinas provenientes de Chile, Perú, Argentina y Bolivia, y 15 hermanos Capuchinos de España, El Salvador, Brasil, Puerto Rico y Argentina, guiados por los hermanos Sidney Machado y Leonardo González.




Los objetivos propuestos para el curso fueron:

• Profundizar en el conocimiento de las fuentes franciscanas (Escritos  y hagiografías) y en las claves centrales de nuestra tradición.

• Recrear los valores específicos de nuestra identidad carismática.

• Buscar nuestro modo de estar en el mundo y en la IGLESIA desde el talante propio de ser menores y hermanos, creando espacios de justicia y de paz.

En las mañanas se realizaron las visitas a los lugares franciscanos, dando tiempo a la reflexión personal y a las celebraciones comunitarias y por las tardes el curso ofreció tres horas de reflexión sobre contenidos de espiritualidad franciscana.



El Secretariado General de la Formación ofrece estos cursos de tres semanas de duración en varias lenguas, para favorecer la renovación de los hermanos que llegados a una cierta edad, en el tiempo de la madurez, de las responsabilidades y compromisos, afrontan también los problemas, el activismo y el estrés. A la vez que nos sentimos en plenitud física y mental, vamos experimentando el fracaso, la dificultad de entrabar diálogo profundo con nuestros hermanos, el peso de la soledad, el silencio de Dios. Es momento de pararnos y respirar, de encontrar un equilibrio entre la acción y la contemplación, entre el apostolado y la interioridad, entre los adentros y el afuera.

Se trata de recorrer los lugares franciscanos vislumbrando el sentido de la vocación y, de la mano de Clara y Francisco, redescubrir el gozo de ser hermanos menores. El curso está también abierto a todos los hermanos responsables de la formación.